René Peña, fotógrafo autodidacta y graduado en lengua inglesa en el Instituto Superior Pedagógico de Lenguas Extranjeras de la Universidad de La Habana. Entre sus exposiciones individuales destaca en 2006 Territorios y cartografías en blanco y negro, en la Feria Internacional de Grabado y Ediciones de Arte Contemporáneo en la Galería C-5 de Santiago de Compostela; en 2008 Black Album en la Galería Santa Fé de Bogotá; en 2009 participa en la X Bienal de La Habana con Escenas urbanas y en 2010 Blue Child en La Galería Villa Manuela de La Habana. Su participación en exposiciones colectivas se desarrolla desde 1997, destacando entre las más recientes la exposición Colaterales, en la Havana Galerie de Zürich en 2006; en 2007 Cuba Avant-Garde. The Faber Collection, en el Samuel P. Harn Museum de la Universidad de Florida; en 2010 Queloides en el Centro de Arte Contemporáneo Wifredo Lam de La Habana, Without Masks. Contemporary Afrocuban Art from the Von Christierson Collection, en la Johannesburg Art Gallery, en 2011 participa en la exposición Cuban Visions, en el Metropolitan Pavilion de Nueva York.
Con mis fotos no pretendo explicar nada acerca de mí. No son autorretratos. Utilizo mi cuerpo como soporte de mis elucubraciones acerca de la sociedad.
No me interesan los individuos en particular. Nadie se debe creer tan importante como para ser el centro de algo. Esas actitudes pueden crear determinado tipo de monstruos. Mis cuentas no las quiero ajustar con los individuos, pero sí con la sociedad.
En mis fotos trato de evitar gestos dramáticos, y sentimentalismos, que propicien cualquier tipo de relación personal con quien observe las imágenes.
El asunto central de mis series fotográficas es la relación que se establece entre los individuos y las instituciones (familia, educación, partidos políticos, religión…). También presto atención a la contradicción que se crea cuando tratamos de conservar nuestra individualidad a la vez que tenemos que lidiar con nuestra condición de entes sociales.
Considero a la fotografía una herramienta contundente, unas veces a favor de causas justas, otras de la mentira, y casi siempre como proveedora de nostalgias.
